"Daiichi": una curva mortal a los pies del monte Fuji
Este mes comienza el gran espectáculo de la F1 y aunque últimamente no pasa por su mejor momento -Mercedes-AMG está consagrando el mayor dominio de la historia y ya sabemos que Hamilton alcanzará su octavo título mundial- siempre deja pinceladas de emoción. Uno de los aspectos negativos más achacables al gran circo son los circuitos. Trazados planos, con grandes escapatorias y con pocas zonas dadas al adelantamiento, vistos también los monoplazas actuales, más largos y anchos.
Por ello qué mejor que descubrir algunos trazados que quizás encajarían entre uno de esos 23 circuitos que conforman el calendario actual. El primero de esta serie de tres es el mítico Fuji Speedway. La vista privilegiada del monte Fuji, sumado a las grandes batallas que allí se han vivido, así como -por qué no decirlo- los videojuegos han hecho del circuito japonés un must para quemados. Los amantes del JDM lo conocen a la perfección.
Esta vez no hablaremos del actual Fuji, que conocemos todos, sino de su versión primigenia. Una verdadera trampa mortal para los pilotos. Desde su inauguración en 1965 ha sufrido numerosas modificaciones, perdiendo su carácter velocista para terminar siendo todo un rutero. A pesar de todos los cambios, sin embargo, su silueta ha permanecido reconocible todo este tiempo.
El circuito japonés fue concebido inicialmente como un gran óvalo destinado a albergar pruebas de la NASCAR nipona pero la falta de fondos hizo que sólo se pudiera terminar la primera parte, siendo esta la famosa curva Daiichi. A ella se llegaba desde la recta principal -de dos kilómetros de longitud- y tras un peligroso cambio de rasante se entraba en la famosa curva peraltada. Los prototipos de mitad de los sesenta llegaban a 300 km/h a la primera curva tras la recta, en donde tenían que lidiar con un peralte de 30 grados de inclinación.
Los monoplazas de Fórmula Uno nunca se enfrentaron a este peralte, pero sí los de la Fórmula Indy. Carrera de aquel certamen -por cierto- que ganó Jackie Stewart.
A las condiciones exigentes del asfalto se sumaba la climatología adversa que suele afectar al circuito. Niebla y lluvia acompañan al trazado de forma habitual.
Circuito Fuji Speedway visto desde el aire, con la gran curva peraltada "Daiichi" a la derecha |
Por otra parte, las formas originales del circuito solo se mantendrían hasta 1974 cuando después de varios accidentes mortales -en el más destacado dos pilotos morían y varías personas del publico resultaban heridas- recortaron toda la curva peraltada y sus enlazadas. De los seis kilómetros que medía originalmente pasaría a medir cuatro y medio, después de la eliminación de todo el primer sector.
Momento del impacto del Ferrari, con el peralte de Daiichi en segundo plano |
El "Monza japonés" no volvería a la categoría reina hasta 2007, siendo sólo un año después el último Gran Premio, dónde fue Fernando Alonso el ganador. El nuevo Fuji Speedway fue acondicionado entonces para la Fórmula Uno, siendo el arquitecto Hermann Tilke quien añadiría grandes escapatorias de asfalto. Debido a esto, aumentó su seguridad, pero también se hizo un circuito más permisivo con los fallos de los pilotos. La recta, la propia curva Daiichi y la chicane, eran por aquellos años los puntos más habituales de adelantamientos.
Esas imágenes del Monte Fuji me han retrotraído a la infancia cuando veía en los dibus de Mazinger Z surgir de la piscina de las instalaciones con el imponente volcán nevado al fondo.
ResponderEliminarLeí que Fuji era el feudo de Toyota mientras Suzuka era la casa de Honda, pero desconocía la terrible historia de la curva Daiichi, algo así como la Nordcurve de Avus.
Un saludo.
Toyota creo que es la propietaria del Fuji, comprando el circuito específicamente para adecuarlo a la F1, luego cuando dejaron el gran circo dejaron de pagar el canon y adiós. Tito Bernie no se anda con chiquitas, a mí me hubiera gustado seguir viendo al Fuji alternándose con Suzuka.
EliminarSaludos!
Enhorabuena por esta iniciativa que has tenido para descubrirnos mejor la historia de algunos trazados míticos. Lo cierto es que no conocía para nada de la existencia anterior de este trazado (aunque el mundo de la competición no es mi fuerte) ni tampoco del terrible accidente de Villeneuve... A ver con qué más cosas nos sorprendes, jejeje
ResponderEliminarSaludos ;)
Más que circuitos míticos, más bien curiosos, el siguiente sólo albergó un par de carreras, literalmente. La verdad que he preparado una serie un poco trágica porque todos tienen en común accidentes graves, pero no creo que haya circuitos de más de treinta años que no los tengan.
EliminarSaludos!
No estoy seguro de haber entendido bien, por favor ayudame a repasar: querían hacer un óvalo, hicieron un curvón y quizás una recta pero no les alcanzó la plata para hacer otro curvón y otra recta, entonces hicieron toda una ensalada de curvas y rectas internas que eran más baratas? Cómo es que esa ensalada era más barata que hacer una recta y el bendito otro curvón?
ResponderEliminarOtra cosa: los F1 actuales son más largos, pero seguro que son más anchos?
Has entendido bien, es como si cuando construyeron el Indianápolis Speedway el presupuesto sólo les hubiera dado para construir la primera recta y la primera curva, siendo esta un semióvalo. Aquí pasó lo mismo. La ensalada de curvas es más barata de hacer que una recta y un curvón, ya que las curvas puedes adecuarlas al terreno y con un ovalo necesitas amontonar tierra y construir muros para dar el peralte adecuado a toda esa curva. Las enlazadas se adecuan al terreno y apenas precisan de excavadoras.
EliminarCon lo de los monoplazas te dejo un link. Quizás la diferencia de anchura no sea tan patente con los coches de los 80, pero sí con los de principios del 2000;
https://www.facebook.com/Fuelgarden/photos/pcb.1799238720185968/1799237503519423
En esta la perspectiva puede engañar, pero diría que un monoplaza de 2005 es más ancho que uno de los ochenta/noventa; https://en.wikipedia.org/wiki/History_of_Formula_One#/media/File:Ferrari_Formula_1_lineup_at_the_N%C3%BCrburgring.jpg
Saludos!
Conozco a Fuji desde fines de 1976, cuando se corrió el hoy famoso GP de Japón bajo la lluvia, carrera que se repitió en 1977. Hoy ya no es lo mismo, pero al menos se puede disfrutar la larga recta en las carreras del WEC.
ResponderEliminarAbrazo!
Al menos a día de hoy es más seguro y tampoco no ha perdido tanto sus formas. Eso sí, creo que es demasiado permisivo con los pilotos. Al menos nos brinda con buenas carreras en lluvia.
EliminarSaludos!