Artefactos de Bonneville: Citroën DS 21
Bonneville es un nombre indudablemente unido al motor, desde la famosa Triumph Bonneville hasta la Bonneville Speedway donde se han llevado a cabo numerosos récords de velocidad. El Salar de Bonneville es como su propio nombre indica un desierto salado situado en Utah en Estados Unidos. Prácticamente desde la creación del automóvil esta enorme planicie ha sido utilizada por equipos profesionales hasta verdaderos amateurs para comprobar la velocidad punta de sus coches.
En todos años Bonneville nos ha dejado verdaderos artefactos, que en esta nueva sección trataremos de descubrir brevemente ¿El protagonista de hoy? Un Citroën DS 21.
El Citroën DS siempre fue un coche burgués, un coche innovador, enfocado al confort. Elegido en algunas ocasiones como el coche más bello de la historia. Sin embargo la competición no fue ajena para él, obteniendo victorias en el Mundial de Rallyes -en nada más y nada menos que Montecarlo- y puestos destacados en el Rally Raid Safari. A pesar de todo, uno de los símbolos de la industria europea nunca fue pensado para impulsarse cerca de los 400km/h.
Su trabajada aerodinámica quizá fue la puntilla para que unos locos montaran en él un enorme V8 de origen Chevrolet de 8.2 centímetros cúbicos. Alimentado por alcohol un compresor de grandes dimensiones lo llevan hasta una cifra de nada más y nada menos que 800 caballos.
Como siempre en estos proyectos casi de garaje y sin el soporte de las marcas oficiales, la información es escasa. El periodo de competición del DS 21 no fue corto, documentándose que desde el año 1998 competía, conociéndose sus últimas noticias en el 2005. Apodado "Thunder-frog", o en español la rana trueno por aquello que en Norteamérica se conoce a los franceses por consumidores de ancas de rana.
Sea como fuere, este DS ya logró su rato de fama en Bonneville. Un anfibio entre la potencia americana y la sofisticación francesa.
Fuente: forum.ideesse.
Sígueme en Twitter: @Garaje_22
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Su trabajada aerodinámica quizá fue la puntilla para que unos locos montaran en él un enorme V8 de origen Chevrolet de 8.2 centímetros cúbicos. Alimentado por alcohol un compresor de grandes dimensiones lo llevan hasta una cifra de nada más y nada menos que 800 caballos.
Como siempre en estos proyectos casi de garaje y sin el soporte de las marcas oficiales, la información es escasa. El periodo de competición del DS 21 no fue corto, documentándose que desde el año 1998 competía, conociéndose sus últimas noticias en el 2005. Apodado "Thunder-frog", o en español la rana trueno por aquello que en Norteamérica se conoce a los franceses por consumidores de ancas de rana.
Sea como fuere, este DS ya logró su rato de fama en Bonneville. Un anfibio entre la potencia americana y la sofisticación francesa.
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En los Salt flats de Bonneville se puede encontrar de todo, sobre todo artefactos de transformación artesanal como este "Thunder frog" algo apocalíptico, casi digno de una peli de Mad Max, pero sin duda el DS más veloz del planeta.
ResponderEliminarMuy curioso!
¡Muy buen sonido!
ResponderEliminarLos DS están hasta en la sopa, tengo uno de la Maraton Londres-Sydney de 1968:
http://juanhracingteam.blogspot.com.ar/2011/11/035-citroen-ds21.html
Bonneville da para todos los gustos...
Abrazo!
Si al DS se le ha conocido por el pseudónimo de "tiburón" éste sería más bien un "torpedo" ¡Madreeeee!
ResponderEliminarXavi, los Salt Flats son una jungla de prototipos extraños. Esperemos poder ir descubriendo más aquí en el blog.
ResponderEliminarJuanh, precioso ese DS con esa combinación de colores y su sonido, es espectacular.
Álvaro, un torpedo tierra-tierra o tierra-aire en caso de que algo saliera mal ;)
Saludos a todos!